una poesía despojada de elementos poéticos no es novedad.
ya Marcial sobre el quincuagenario martirio de Cristo lo hacía.
lo hicieron los poetas de lengua germana
lo hicieron los poetas de lengua larga
lo hicieron los poetas que no escribieron nunca una poesía
lo hicieron los poetas que pretendían ser chistosos
lo hizo Rimbaud y lo hizo Verlaine y lo hizo Macedonio.

y ya más acá lo intento y lo logró y lo sepultó Nicanor Parra.
habrá que volver entonces a la poesía de los tropos retóricos.
habrá que volver a rascarse el innombrable con un hisopo.

los verdaderos poetas están cansados de los falsos profetas.
los académicos están hastiados de los burros que escriben.
las niñas bien están cansadas de que sus escritos sean comparados
por una cuestión meramente genérica a los escritos de
cualquier pelafustán que ha aprendido a contar las sílabas.

la poesía debe ser respetada como el templo sagrado que es.
la poesía debe hacerse valer de una buena vez por todas.

linchamiento público al punguista de versos!
linchamiento público y gratuito al marmota de la olla!
linchamiento público y púbico al poeta de las malas mocedades!

hay que volver el rostro a Darío?
hay que arrojar los ojos hacia el siglo XXII?
hay que cortarse el pelo y dejar de hurgarse la nariz?

algo habrá que hacerse con el asunto.

la poesía necesita constantemente un electrochoque
para no morir de susto/

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