en los alrededores de esa mujer
se levantan murallas
que guardan dentro ciudades
que guardan dentro casas con techos iguales
que dentro guardan hombres que lloran
todos del mismo modo

en los alrededores de esa mujer
hay bosques con árboles imposibles
con imposibles primaveras
de imposibles colores
de olores de otra historia
de una vegetación ajena y lejana
negada al abrazo de un río imposible

en los alrededores de esa mujer
merodea un lobo furioso y viejo
que fuma un cigarrillo de plástico
y mira sobre el piano
los diplomas de concursos literarios
que ha ganado entre otras vidas

sujetos tácitos dicen
haber visto con sus propias manos
flores y pájaros y nieves negras de palmas negras
y medicamentos rancios y velones taciturnos
y hombres que arrojan piedras contra el mar
que circunda -silencioso y austero- el sexo
el terrible y demiurgo sexo de una mujer
que sonríe alrededor de la tormenta/

1 comentario:

  1. Conozco una mujer así, abarcada por murallas y una fosa repleta de cocodrilos sedientos. Y detrás de la muralla, apenas se deja ver un corazón latiente, sincopado y voraz. Voraz y veloz. Y rápidamente vuelve a esconderse para que nadie lo vea.

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