es tan posible la imposibilidad de lo posible.
dejar sobre la mesa del living mi juego de llaves,
por ejemplo.
que me llames
y esté tan solo a dos cielos de distancia.
hubiera sido hermoso haberte visto en piyama
andar descalza hasta la cocina
con los ojos barbudos de sueño y llamarte
y que estés tan solo a dos besos del día, o pienso
algo más atroz por cotidiano en un toallón colgando de
una silla mientras te pasás el secador por el pelo,
por ejemplo, esa posible imposibilidad de lo posible,
ese irme, ese dejarte, ese abandonarme siempre, ese
odio constante en que se enciende el leño rústico de
un amor que ya no sabe sonreír sin auxilio de la lluvia,
confío menos en vos que en una turba de gigantes y
sé que mirás a todas partes antes de besarme los ojos,
dejar al costado de la misma cama los zapatos que
ya tienen tantos remiendos que dan tristeza usarlos,
la cortina de baño, el terciopelo del sillón, el velador que
encontramos dentro del contenedor de la basura y me amás
y te amo y eso no alcanza ni para comprarnos el pan del
día, ni para pagar al cadete ni para el azúcar nos
alcanza, hubiera sido lindo, sin embargo
por ejemplo,
que para tocar tu mano me bastase hacer silencio/

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