los olímpicos/

los poetas que han conseguido
por belleza de trabajo
por fuerza de trabajo
cierto amparo
cierto capital
cierta buena-venturanza en el mundo de la poesía
(créanme, el mundo de la poesía es mucho más grande
que el mundo en sí)
esos poetas, a esos poetas, nosotros
nosotros poetas que andamos a las patadas con el lenguaje
nosotros poetas que no tenemos otra cosa que ganas
nosotros poetas que juramos por la Santa Poesía que no
quisiéramos ser tan malos
que, de verdad, quisiésemos hallar la palabra justa.
nosotros les rogamos
les pedimos
les reclamamos un poco de conmiseración
y de bondad.

dígannos, qué culpa tenemos si las Buenas Ideas
y las geniales metáforas
y las Hadas Poéticas bailan en sus bosques
mientras en los nuestros andan animales rabiosos
que mastican cortezas piedras
se meten desnudos a los ríos
y se tiran cuescos de colores.

nosotros poetas de ciudad cosmopolita
que nos cuesta un Perú lograr una voz propia
una estética propia
una propia comida

les rogamos les pedimos les reclamamos una poca de camaradería.
al fin y al cabo la Historia de la Poesía es tan azarosa
que quizá
el día de mañana
sean ustedes, los olímpicos, los que abran las manos
pidiendo piedad a nuestros animales del bosque/