no se puede andar muriendo todo el tiempo, le decían.
pasaba una niña en bicicleta y él moría.
un pájaro en el cable del teléfono, él moría.
una lluvia tras los cristales, moría.
nubes, mariposas, ascensores, moría.
no se puede, le decían, jorobar a la muerte a cada rato.
pero no había caso, se la pasaba muriendo de noche a día.
moría por el color de los paraguas.
por la enciclopedia británica moría.
moría por si las moscas.
por si acaso moría.
moría de vida,
de muerte moría.
no se puede,
le decían.
mirá que la muerte no puede andar detrás tuyo todo el día.
pero no había caso, él moría y moría.
hasta que un día se cansó de andar muriendo
y se sacó los zapatos
y se sacó la camisa
y se sacó todo lo que llevaba puesto
y se acodó a la vida
y se dejó crecer los años y el cabello
y se dejó mirar por encima de la luna
y se prendió un sol y un cigarrillo
y se dejó de andar jorobándole la vida a la muerte/

1 comentario:

  1. Me encanta tu poesía, León. Gracias por compartirla. Es un placer leerte.

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