palabras a mis amigos los pájaros/

basta abrir la ventana
asomar la cabeza al mundo
para darnos cuenta
que algo anda mal: todo.
que uno no tiene la solución
pero que seguramente estará allí
en la palabra
no en la palabra con uno mismo
los monólogos interiores llevan al
suicidio de lo colectivo, es decir,
al suicidio del propio del individuo;
basta mirar una sola vieja acarreando
un carro lleno de cartones
para darnos cuenta
que algo anda mal: todo.
uno no tiene la solución
pero si el convencimiento
de que en el diálogo abierto
en la organización horizontal
están desde siempre las claves
para que todo empiece a estar mejor.
sin banderas de partidos políticos
nuestro partido político debiera ser el Hombre
el hombre en su relación con la naturaleza,
porque evidentemente
algo falló en la Historia
ese algo es la sociedad industrial
la sociedad de consumo:
necesitamos casas más grandes
automóviles más grandes
zapatillas más grandes
remeras más coloridas
hamburguesas más grandes
senos más grandes
televisores más grandes
máquinas que hagan todo por nosotros
hasta que inventemos una máquina
para ya no necesitarnos ni a nosotros mismos.
basta asomar una oreja al mundo
para darnos cuenta que algo falló: todo.
la agricultura sometida a una tecnología venenosa
un mercado que jura felicidad en cada objeto
un individualismo atroz que brega solo por el éxito
una humanidad enceguecida
o peor aún
entretenida en miles de imágenes opresoras.
yo soy un poeta menor
apenas un limón un higo una mandarina
pero intuyo que la clave está en la palabra
en la palabra con el otro de carne y de hueso
con sus tristezas
con sus lastimaduras
con sus amores y sus utopías
en el diálogo horizontal sin apuros
porque el reloj es el gran verdugo de este sistema,
perdón poesía
me agarraste hablándole a los pájaros
porque no somos otra cosa que pájaros
pero día a día los discursos hegemónicos
se encargan prudentemente de convencernos
que volar es cosa de idiotas.
este no es un poema derrotista
porque nos quedan las palabras
mientras tengamos las palabras
nunca nos habrán derrotado/