nochebuena 1993/

érase una vez que no teníamos
otra cosa que siete rodajas de ananá
con azúcar

érase nochebuena en la casa de la nona
no había sino una sidra
érase la alegría de tenernos con vida
nada más
nada menos

papá presidía la mesa
un pollo sazonado con verduras
una jarra con jugo
los ojos de la nona brillaban como
dos arbolitos de navidad

no teníamos otra cosa que tenernos
y papá se hacía el viejito sordo
y nos matábamos de risa
nos fusilábamos de amor con la boca

llegaron las doce brindamos por la
amnistía de los pájaros que éramos
Nona sacó de la antiquísima heladera el
plato
con las 7 rodajas azucaras de ananá
érase que no teníamos otra cosa que el cielo
mejor dicho
érase que éramos los más ricos de la Tierra/

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