para que vos me amés.
los trenes dejan una estela de luz en los hangares.
la lluvia decolora las viejas estatuas del Parque Alberdi.
desde los edificios de Buenos Aires caen los suicidas
arrojados por la mano invisible del mercado.
un gramófono suena en la casa de un zapatero
un viejo anarquista español que todavía sonríe por las tardes.
para que vos me amés llegan a horario los autobuses
una araña desteje su calvicie detrás de los relojes 
una grúa desmantela sombras en la avenida de los cipreses
para que vos me amés hay un Dios y una gramática
y una pintura al óleo de La vuelta de Obligado
para que vos me amés los continentes se disiparon
los homínidos aprendieron a cocer los alimentos
se crearon el día y las horas de noche y los caracoles
para que me amés vino la lluvia después del trueno/

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