el visitante llegó de noche
tocó tu boca
midió tus pies
agarró tus manos y las puso en una balanza
pesó tu espalda y tu sexo
palpó tu cabello con el agua de la luna
luego vino a buscarme
me zamarreó bruscamente
despertate me dijo
existe me dijo
usa zapatillas de colores
y unas ropas que te harán gracia
y unos ojos que te harán ver
las cosas como son
en realidad
corrí en piyama por las calles
un policía tocó fuertemente su silbato
estoy apurado le grité y seguí corriendo
hasta encontrarte
tendida en la noche
llena de estrellas en los hombros
dijiste mi nombre y te dije quiero
me costaste una vida dijiste
yo ahorré beso por beso para besarte te dije
entonces era verdad que el amor bastaba
para agarrar del cuello a la melancolía
y decirle que se fuera
tomaste mis manos para que yo bebiera de un sorbo
la lluvia que venía persiguiéndonos/

No hay comentarios:

Publicar un comentario