cuando las estatuas nos muerden la sombra
un timbal, un acuífero, una iglesia
donde uno entra de rodillas a dejar la rosa
un comienzo precipitado, un balbuceo
el ala de un insecto o de una mariposa
la mujer de una vocal abierta donde llueve
una consonante mojándonos la boca
es entre otras cosas jardinera, amante, hermana
es guerrillera y maestra u obrera negra y roja
es una selva y es asfalto, la mujer el día
una vela encendida, furioso amor a todas horas
la mujer es esa cosa sustantiva y adverbial
crepita un sexo verbal que nos sacude la boca
la mujer cuando llora abre grifos en la luna
y cuando ríe su cintura parece una redoma
la mujer es esa cosa que nos deja en la lengua
un diccionario de penas y un fusil en la memoria,
si de pronto se nos queda de ojos abiertos,
infinita, ni hay muerte posible ni habrá jamás derrota/
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