oíme 
esto es urgente
tenés que prometerme
que vas a olvidarme
que no habrá página de libro
ni pájaro
ni río
ni nombre alguno de calle
o de marca de cigarrillo
que te conduzca a mí
soy aire
oíme
esto es urgente
no puedo conmigo mismo
me peso mucho
a penas puedo levantarme
y cargarme de la cocina a la cama
cada hueso pesa como un camión vacuno
oíme
te amo
pero hace rato que tengo cenizas
hace rato soy una espina en mi ojo
salvate de mí
haceme caso
oíme  ¡haceme caso!
mi cabeza no va a estar mucho más tiempo
sosteniendo la trampera
donde mis sueños se asoman con
las mandíbulas en sobrecitos efervescentes/

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