Barco Viejo ...

Barco Viejo insiste en naufragar.
Niño de Plata estira sus dedos y lo deja
a salvo lo deja
sobre la orilla o sobre los durmientes del puerto,
donde el indefectible olor del surubí y el cremón
arrecian las aletas nasales de Niña de Viento;
pero basta que Niño voltee su cuello almidonado
para que -otra vez- Barco Viejo se hunda en las marañas
estomacales de alta noche en la baja mar;
entonces Niña mira severa a Niño "déjalo que se hunda"
agitando los brazos flacos como astas de banderas
Niño ahuyenta una brusca negación y solo dice "no";
Barco Viejo vuelve al aire transparente pero helado
de las horas en que la luna rasca el abdomen de
los sapos que no aprendieron aún a besar princesas;
desde la distante ciudad Mamá Oro los llama
y Niño de Plata y Niña de Viento corren jugando
a tocar primero las rodillas de Mami.
el último, por supuesto, tiene cola de chancho. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario