ilusiasiones ...

imponerle al amor la voluntad
la propia voluntad
o la ajena
violentarlo con sueños
con eternidades selectivas
con palabras que interpelan 
su invariable sigilo
su paso lento
su inmediatez de lluvia
su paraíso
imponernos la llama
la meta
el ordinario objetivo de la vejez
su llegar a viejos con las manos apretadas
con los dientes apretados
con las vestiduras raídas
y los zapatos agujereados 
y los botones de la camisa cansados de dedos
que los aprietan
que los transpiran
imponerle al amor un rostro
un nombre
coexigirle la presteza la calma el fuego
un lugar en la cama diametralmente cercano
pensar que el amor nos piensa
cuando su existencia es de cenicero o de canario
y está allí
a despedir de boca
a holocausto de olvido
esa piedra
aventada a la calle
que nos deja sangrando
las manos la sombra la nariz/




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