queremos ser Rimbaud cuando jóvenes
pero él fue el mejor
escribió a fines de la era victoriana
del mismo modo que hoy escribimos nosotros
dijo que había que ser absolutamente modernos
y nos sacó para siempre las palabras de la boca
el pan de la boca nos sacó
luego se fue al África colonial a vender armas y esclavos
nosotros apenas podemos vender seguros de vida
o golosinas
o libros
o una campera de cuero usada
no admiramos a Rimbaud cuando jóvenes
lo admiramos cuando viejos
cuando entrando ya en la recta final de este espectáculo
decimos que un buen vino
y una buena tira de asado
son la ambrosía
él fue el mejor
pero nosotros podemos comer y tomar y reproducirnos
y orinar mirando la leche de la luna,
hasta que nos muramos entonces
somos mejores que Rimbaud/