no sé qué tuvo que ver la mariposa.
pero algo tuvo que ver.
eso lo sé.
no hace falta ser un genio.
ni haberse licenciado en filología hispánica
ni haber recibido el honoris causa en universidad alguna.
en verdad
si hurgamos un poco con la uña
la gastada y no obstante viva corteza con que la realidad
se presenta ante los ojos piadosos del mundo y sus ángeles,
en verdad
todos lo saben
nadie lo dice
algunos lo callan,
no sé qué tuvo que ver la mariposa en todo este asunto
pero algo tuvo que ver,
de eso están seguros los estudiantes de derecho
los estudiantes de agronomía
los enamoradizos enfermos que tosen y dejan un pedazo de
boca sobre la ventanilla de los colectivos
las mujeres que miden setenta y siete centímetros
los sapos que andan siempre escondiéndose de la luna
y de su frígida luz,
ay, mariposa azul o verde o rosa
o mariposa roja como el dolor de una piedra,
cuando quieras, cuando te parezca,
revelame
revelanos
el secreto/