retórica del pájaro que grita/

y de pronto grita
el pájaro que olvidaste bajo una pila de expedientes grita.
el pájaro que planchaste y escurriste y colgaste en la terraza
no se aguanta tanto broche
tanto cielo derrochado
tanta nube suicida que va perdiendo sus playas a medida que
gira el mundo y el pájaro vigía que no durmió jamás sino que estuvo
acechante vigilante preceptor de utopías
de marmitas que bullían por las noches
de parábolas errantes fugitivas
ah
el pájaro de pronto grita el nombre estrafalario del amor preso en
su latita de pescado
el pájaro olvidado vuelve con furia de serpiente enajenada
a golpear la ventana
por donde tu mano temerosa lo arrojó un día
y de pronto tu alma grita con el pájaro vivo
el pájaro blanco
el único erguido entre las sombras masculladas
entre las libertades ardidas
hastiadas ya de tanta sepultura de canarios
tanto asesinato de ternuras
y
de pronto
cuando menos lo esperabas
el pájaro grita
te mira y grita
y por fin
abrís
los
ojos/

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