Taller de poesía/

si yo diera talleres de escritura poética
tendría miles de juicios sobre mi cabeza
la espada de Damocles sobre mi cabeza

si Parra hubiera venido a mi taller literario
le hubiera dicho "muy bonito pero intentá
utlilizar más tropos retóricos"
yo hubiera echado a perder a Parra.

si Mario Benedetti hubiera venido a mi taller
le hubiera dicho "muy bien pero la literatura
debe permanecer al margen de la política"
yo hubiera arruinado la carrera de benedetti.

si Charles Baudelaire hubiera venido a mi taller
yo le hubiera dicho "muy bien pero en pleno siglo
del positivismo debés abandonar el simbolismo"
yo hubiera dado por tierra a Charles Baudelaire.

si Matsuo Basho hubiera venido a mi taller
le hubiera dicho "muy bien pero escribís demasiado breve"
yo hubiera malgastado la vida de Matsuo.

si Apollinaire hubiera venido a mi taller de escritura
yo le hubiera dicho "eres talentoso pero la poesía
no debe formar dibujos bajo ningún punto de vista"
yo hubiera hecho trizas al pobre Guillaume.

y así con todos.

si hubiera venido a mi taller Neruda
le hubiera dicho "eres bueno realmente pero
tanto crepúsculo y tanto amor y tanto Chile cansa"
yo hubiera arruinado a Neftalí Reyes.

si hubiera venido a mi taller Juan Gelman
yo le hubiera dicho "muy bien pero esas barras
que colocás en mitad de los versos no quedan bien"
yo hubiera echado a perder a Gelman.

y así a todos los poetas del mundo
suele pasarles
cuando siguen el consejo de escribir según la norma

y como dice el poeta Mascaro:
a la única Norma que hay que respetar
es a la que vende golosinas en el kiosco del colegio/





 

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