alguien ha tirado en las vías del tren
línea Tolosa- Constitución
un paraguas verde como un niño rana
allí el pobre parador de aguas piensa
en la injusticia de las fábricas de paraguas
porque esa fábrica donde trabajan obreros
obreros que pagan alquileres altísimos
obreros que viajan en colmados colectivos
o en automóviles que le comen un ojo de la cara
obreros que mandan a la escuela a sus hijos
obreros que trabajan muertos de sol y de cansancio
esos obreros son los padres
esas máquinas son las madres
del paraguas verde como el pezón de una cotorra
que alguien
por desidia
o por suicidio refractario ha decidido dejar huérfano
sin dedos que lo abran a la luz de la luna
sin manos que lo cierren a la luz de la aurora
sin niños que lo usen de metralleta de guerrillero
sin un perchero digno del cual colgarse
a descansar de lluvias
y del croar místico de los sapos que aún no aprendieron
a tocar el violonchelo bajo el balcón de una dama/