alguna vez yo también fui bueno.
me levantaba temprano sin renegar de nada.
ponía en la hornalla el agua para los mates
me peinaba hacia atrás con Lord Chester
hasta usaba perfume en el cuello
pantalón de vestir
camisa
no corbata
y mis zapatos relucían
y entraba a los colegios con mi bolsito de profesor
con mi cara de Play Móvil
con el librito de Sintaxis y semántica bajo mi brazo
porque creía en el orden natural de las cosas.
alguna vez yo también fui un buen sujeto
tenía la consciencia tranquila como un buda
el corazón relucía como un cáliz,
y ciertamente ya hubiera podido haberme muerto sin más,
cortaba el césped
iba caminando los domingos a las 8 de la mañana a comprar el diario
pasaba por la panadería
y me pasaba el día creyendo que el universo estaba ordenado
en imagen y semejanza, hasta que un enorme escupitajo me cayó
del cielo en la cabeza
y tuve la epifanía de que la realidad es siempre una excusa
una mesa de entrada
un canapé hecho de aire, rulemanes y hojas del invierno/

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