yo, hombre de insuperables años,
mientras no te amaba andaba enredado con tu sombra
golpeaba los eslabones de tu cervical
para entretenerme con el oboe de su signatura
y oía tu nombre y echábame a reír como un lagarto
si nunca has oído la risa de un lagarto
puedo decirte entonces que reía como un dromedario
yo, hombre de los cientoundientesdemarfil,
mientras no te amaba me acostaba boca abajo
desnudo sobre la Tierra
a modo de esos animales que carecen de olfato
o de apetito
que más que animales son seres inorgánicos
cortados por vaya Mefisto a saber cuáles tijeras
mientras no te amaba me subía a los autobuses
buscando una butaca donde disponer mi sonrisa
de libro pasado por agua, de torniquete de herido,
yo, mientras anduve de fotografía en fotografía,
bebiendo ron con los futuros fantasmas de mis memorias
y no te amaba todavía tenía sin embargo una paulatina
melancolía de Hombreacodadoalaventana,
todo me lo trajo tu cuerpo
viniste trayendo colgados de tus cabellos a los oficios
a las mujeres y a los hombres
llegaste, Hermosita, y trajiste la modernidad en tus hombros
yo, que estaba masticando luces en la aurora
me vi, de pronto, en posesión del día/

No hay comentarios:

Publicar un comentario