vuelvo a pensarte con alegría, Mundo,
con tus lluvias empapadas de paraguas
con tus verdes y elegíacas persianas
vuelvo, Mundo, a pensarte con alegría
miro los altos muros de tu latinidad
toco el áspero precipicio de tu cielo
respiro la loca paloma de sonidos
que te acuna en la noche junto al mar
y te veo bello, Mundo, en tus intersticios
y te descubro desnudo de árboles
que trepan por tus rígidas vértebras y vuelvo,
Mundo, a pensarte con indulgencia,
a apoyar mi nariz contra el húmedo aire
que resbala por tus calles y por tus campos,
miro la mujer que amo junto a tus rosedales
y vuelvo, discreto y loco mundo,
vuelvo a pensarte con alegría!