esta vez ...

asumirme feliz a tu lado.
saber que tocar tu mano
respirar tu aliento
sentarme a la hora del almuerzo
a un par de centímetros de tu vida
esas cosas
por pequeñas
por gigantes
me hacen un hombre menos frívolo
menos atento a las propagandas televisivas
menos comprador compulsivo de artefactos
que terminan su vida en el galpón
o junto al poste de luz de la calle.
a veces uno se pone tonto
porque vamos
es un lugar cómodo la tristeza
es un sillón de dos puertas la melancolía.
se trata en definitiva de asumir la alegría con franqueza
y no andar temiéndole a la muerte
u otros disparates
yo no he visto nunca un cielo a medio revocar
ni un pájaro que rompa el aire con una sola de sus alas.
asumirme feliz en tanto haya
un solo botoncito de tu sombra dando vueltas
despidiendo airecitos de luz
en algún rincón asequible de esta casa/

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