de los por qué ...

amo todo de vos, por eso te amo.
porque no tengo que separar tus orejas
ni perdonar tu pensamiento
ni disculpar tus malas intenciones.
te amo porque no debo ir justificándote
en mi memoria.
te amo porque se me llena la boca
de los motivos que tengo para amarte.
porque, sabrás, el amor es cuestión de edad.
a mis veinte años amaba porque amaba
era más impulsivo
porque mi propio pensamiento andaba
a la deriva
y entonces uno amaba y no sabía
con exactitud por qué amaba
de pronto nos veíamos amando -con alegría-
es cierto 
pero justificando faltas
que a la corta o a la larga nos deja en la boca
un compromiso
entonces comenzamos a amar porque pobre
no se da cuenta
no fue esa la intención y otras lluvias
a mis 35 años te amo porque amo todo de vos
sobre todo -como te dije- porque no debo justificarte
ni andar haciendo cuentas de los haberes y las deudas
de los contras y los a favores
no te muevo ni un ápice la punta de la nariz
ni el andar de tu cuerpo
ni las palabras con que nombras el resto de las cosas
te amo por boca
por mujer
y por oreja
te amo porque te amo 
y porque te amo es que sé
por qué
te estoy amando/