del otro día ...

del verbo mugir nacerá una
aurora gigantesca que devorará perros
en el alba
perros zumbando en las fosas abiertas de
las calles
perros alienados por el huesito dulce del
viento que aún desconoce la peripecia azul
el cardo azul
la mariposa detrás de una máquina tragamonedas
perros melancólicos metálicos metafóricos
ma me mi mo mu de la aurora gigantesca que
devora yelmos perdidos en el campo 
de batalla y tu maravilloso zapato de heno claudicante
y tu maravilloso labio inconsolable
esa despilfarrada candela arrojando sobre mis pies
veranos crudos que un dios ciego olvido cocer
había un molinillo torpe que
extraía caballos y yeguas en pleno apareamiento
y que volvían al mar luego de orinar la albahaca
y el tomillo
y el romero
siempre el mismo perro cimarrón detrás del teclado
escribiendo para la revista dominical de cultura & artes
pobre!
ay, pobre junto al fuego del carbón domiciliario!
ay, pobre frente al ventanal donde la hojarasca se desnuda!
intransigente pájaro que no cesa de burlarse
del ínfimo lustrabotas que enumeró por ocio
el término en que las máquinas doblegaron la
artesanía y el trabajo del niño se abría como una rosa
y su madre paritaria y la mariposa paritaria
y el perro paritario
del hombre que con pala 
y pico 
y redes 
y músculos
sonríe ante el verbo mugir que incendia una aurora
gigantesca
luminosa que devora perros oscuros perros
en
el
alba/

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