la mujer que no murió de muerte ...
murió de hombre que le dejó en la boca
el pegamento corrosivo del amor doliente
y de calendario murió
y de costumbre de andar tirando la vida entera
como una yegua a quien no le alcanzan
ni los brazos ni el alma
para llevar a cuestas los bólidos del amor
entonces no se diga más una sola palabra
que no murió de muerte ni de pena ni de cielo
murió de hombre que le dejó en el pecho un sol
y nunca más volvió a buscarlo/
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